Vistas de página en total

sábado, 12 de noviembre de 2016

OTOÑO


Qué pasará en estos días de otoño que hay tantas campanas que tocan a la guerra. Hay oráculos que nos llevan al desastres y voces que nunca se oyen.
Llevan treinta y siete años hablando de crear empleo y han montado un mundo lleno de roedores y anfibios que cambian de camisa cada dos por tres. 
Donde estará mi madre que se marchó un día y aún no ha vuelto. Aquí hace frío y el sol ha salido para todos. 
La cama está vacía a pesar de que tiene una buena manta de lana caliente. 
El cuadro que me regalaron está colgado pero tiene polvo. 
Escucho siempre la misma canción aunque no siempre siento lo mismo. Estoy desnudo y la luna parece una tajada de melón, preparado para tomar unas migas. 
Recorro con pasos silenciosos el salón y miro el móvil por si hay alguna noticia. 
Todos los caminos que fuimos abriendo, ellos los van tapando.
Tienes que buscar un sitio donde tranquilizarte y que nadie te diga lo que tienes qué hacer.
Anda y compra una barra de pan y haces unas tostadas con aceite y jamón.
Había una helada en el campo y en la ciudad y las mujeres iban vestidas con ropas invisibles, calzaban zapatos de tacón de punta fina y había puertas cerradas que se abrían con una tarjeta.
Después, se hizo la luz y algunos salieron al exterior, me quedé leyendo en la memoria de tus cabellos, pero estaban revueltos y no entendí nada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario