El 2015 se agotó pero tenemos un nuevo y reluciente año. Ahora
conviene hacer una reflexión de las noticias que han ido ocurriendo a lo largo
de los 365 días en el municipio alcalaíno.
Una de las más importantes ha sido que el PSOE, una vez más, y van diez,
el vencedor en las elecciones municipales, esto quiere decir que serán 40 años
de gobierno hegemónico de esta formación política y de lo bueno y lo malo que
ha sucedido en política, es él el responsable. Pero en esta ocasión la victoria
ha tenido un coste importante y es que ha habido un cambio drástico en las
diversas concejalías, entrando personas jóvenes y desconocidas y saliendo gente
con experiencia y con un carisma político adquirido. Esto ha hecho que haya un
debilitamiento importante en sus filas, que ha obedecido a la imposición de una
élite que en cierto modo gobierna el PSOE. De este modo, el actual alcalde pudo
elegir a su candidatura en la que nadie le hiciera sombra y él se convirtió en el líder indiscutible
por experiencia, autoridad e incluso porque fue el ganador de las elecciones
primarias. Aunque la nueva victoria del PSOE ha contado, también, con algo de
suerte, al no concurrir a las elecciones municipales los nuevos partidos
Podemos y Ciudadanos que hubieran conseguido que el PSOE no hubiera obtenido
otra mayoría, aunque esa opción no ha sucedido y no conviene especular.
Con estas mimbres el Gobierno Municipal ha seguido gobernando y con
ello puso en funcionamiento la nueva Escuela Infantil, que funciona a través de una empresa. Igualmente, se abrió
el nuevo Centro de Mayores y se ha dado fin al Plan Urban, con una importante
inversión pero que no ha colmado todas las expectativas. Sobre todo en la zona
del centro histórico, como el Llanillo y calles adyacentes que aún no se ha
dado con la 'tecla' para que recupere el esplendor y la fuerza de antaño,
porque reúne las condiciones apropiadas para ello.
El gran problema que se viene arrastrando desde hace años sigue siendo
la creación de empleo y sobre todo para la juventud con unos índices de más del
50%. Se puso en funcionamiento el polígono del Llano Mazuelos pero tampoco se
han cumplido las expectativas y a lo sumo que se ha llegado, es a la
construcción de naves industriales para que sean alquiladas por los pequeños
empresarios.
Las urgencias del hospital siguen cerradas, lo que le da un aspecto al
mismo de funcionamiento a medio gas y lo más peligroso es que la población no
reivindica este servicio que es importante pero que en las diversas
manifestaciones que ha habido para reivindicar su apertura, el número de
vecinos siempre ha sido muy bajo.
Pr otro lado, los vecinos alcalaínos siguen siendo conformistas y una
mayoría no quiere cambios, de ahí que en el uno de mayo, solo unas decenas de
personas se manifestaran a favor de mejoras de todo tipo.
Igualmente, la población que cada vez es más mayor, no cuenta con unos
servicios de residencia adecuados, en el sentido de que hay más demanda que
oferta, lo que acentúa el problema de las personas mayores que tienen que salir
de Alcalá para encontrar una plaza residencial.
Asímismo, el socialismo alcalaíno sigue apostando por el deporte y el
gasto es igual o mayor que en los Servicios Sociales, con unas grandes
instalaciones que generan mucho presupuesto económico y que en ocasiones han
tenido que pedir auxilio para seguir funcionando.
El turismo alcalaíno está en alza y en el año 2015 se han visto los
frutos sembrados, así la fortaleza de la Mota sigue siendo el motor del mayor
número de visitas, debido a las inversiones que se han hecho en los últimos
años, aunque también es atractivo el conjunto monumental de todo el municipio.
En ello se han implicado numerosas empresas formando una asociación importante
que es la base para un futuro más próspero. No obstante, en el tema de la
restauración se echa en falta establecimientos que exploten los recursos
autóctonos y pongan en la mesa una gastronomía propia de la comarca que sea un
referente de los productos de la zona.
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