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jueves, 15 de marzo de 2012

LA JORNADA DEL VINO CAMBIA EL POTAJE POR LA OLLA PODRIDA

La XVI jornada del Vino del Terreno de Frailes traerá varios cambios en su celebración, debido a que el PP cogió las riendas del gobierno en la villa de Frailes. Uno de los más esenciales estará en la comida que en vez de ofrecer el famoso potaje de habichuelas, en esta ocasión se ha cambiado por ‘la olla podrida’, un plato que según la cronista oficial de la villa, Maite Murcia, fue importante en los siglos XIX y XX en la cocina frailera y ahora se le quiere retomar para esta fiesta.
El equipo de gobierno frailero ha editado el programa de esta jornadad que se celebrará en una cita, por excelencia republica, el 14 de abril. En dicho programa, el alcalde popular  José Manuel Garrido Romero manifiesta que esta fiesta es un referente a tener en cuenta para toda la comarca y para todas las personas de Andalucía que se desplazan a Frailes en ese día. Añadiendo que además del vino hay otros productos como los embutidos, el jamón, el queso o el aceite que son importantes para la economía local.
En la programación hay el día 13 de abril una cata de vinos y productos de la tierra en el lugar de la ‘Plaza de Toros’, y a partir de las 11:30 horas del día 14 los actos se sucederán, con la presentación a cargo del alcalde y de la edil de Festejos, Lucía Serrano. A las 12:00 horas se presentará la primera guía de turismo del municipio, a cargo de la conceajl de Turismo, Encarnación Castro y será a partir de las 12:30 horas cuando Elvira Rodríguez, diputada del PP por Jaén y ex ministra de Medio Ambiente haga la ponencia pertinente.
Sobre las 13:00 horas, se hará una representación del teatro ‘Frailes arriba y abajo y a partir de las 14:30 horas la comida frailera, preparada por el cocinero Miguel Montes, con embutidos locales, olla podrida, frito de cerdo perfumado a las hierbas aromáticas de la Sierra Sur y dulces típicos de la localidad.
Igualmente, este año el vino no procederá de las bodegas Campoameno de las que casi siempre se ha consumido, sino que procede de bodegas de pequeños propietarios que ellos hacen su propio vino, genuinamente del terreno, estará embotellado y llevará el nombre de cada cosechero, para que los invitados, unos 2.000, puedan saber su origen y poder pedir explicaciones de su buena calidad.

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