LO IMPORTANTE

Resulta paradójico que mientras alardeamos de ser una de las ciudades punteras de Andalucía, los servicios fundamentales no funcionen y la precariedad de los mismos aflore a cada instante. Es inaudito que se vendiera la apertura de la residencia de mayores como un gran avance de los servicios de bienestar social, y hoy nos encontramos con que es insuficiente y la demanda desborda a la oferta, siendo necesario y urgente que se oferten nuevas plazas, pues la población alcalaína es cada vez más vieja y la mayoría de las familias no pueden cuidar a sus mayores.
Otro tanto pasa con los servicios sanitarios, en los que basta que lleguen las vacaciones para que queden éstos desbordados y los sustitutos no cubran las necesidades que la población demanda, como ha ocurrido con el caso del matrimonio de la calle Alférez Torres, en el que el psiquiatra estaba de vacaciones, la enfermera también y la auxiliar no podía dar abasto a las necesidades.
Ahora bien, echamos las campanas al vuelo porque en Etnosur hemos llegado al formato ideal y eso es tan importante como haber conseguido la panacea de la cultura. Cuando en tres días se han gastado más de treinta millones de pesetas, se ha fomentado el consumo de alcohol y estupefacientes y hemos vivido tres días de solidaridad, amor y bienestar veraniego. Y supongo que habrá que estar orgullosos de ello, mientras en las escuelas hay un ordenador para veinte niños, hay que hacer colas en la consulta de los médicos, aún no tenemos una autovía para dirigirnos a Granada y las guarderías son una utopía a largo plazo que las personas con hijos no pueden costear.
Igualmente se ha ido potenciando la cultura de la subvención y ahora nadie se mueve si no hay dinero de la administración por delante y los cuatro listos de turno se están haciendo ricos a costa de los dineros de todos los contribuyentes porque sólo se piensa en la ganancia exhaustiva sin que a nadie le importe el ofrecer unos servicios con dignidad y garantía.
Sería necesario establecer unas prioridades en esta sociedad alcalaína y tratar de cumplirlas a rajatabla, porque lo importante es cumplir con las necesidades básicas de las personas y después alardear de lo superfluo y antes de gastar un duro en diversión, habría que saber quién pasa hambre, si hay bastantes médicos en el consultorio, si el psiquiatra está solo o si la justicia funciona bien. Lo demás son pamplinas y fuegos de artificio que cualquiera puede prender.