Vistas de página en total

miércoles, 29 de abril de 2020

SOÑE CON LA MARTINA



Después de tantos días recluido, había pensado que lo que me gustaría, es salir con el coche, poner un par de bocadillos en la mochila, salir pitando para la Martina y tirarme todo el día andando por el campo, tomando el sol y reconciliándome con la Naturaleza. Ver las cabras y ovejas de Cuqui, pasear por alguna vereda, preguntarle por la salud y tomarme una cerveza con él. Subir hasta la viña que fue de mi padre y recordar cómo cortábamos las uvas en aquel paraje tan pendiente, andando con el pie de medio lado y tomando al mediodía un pedazo de queso, con uvas y un trago de vino. Los capachos llenos de uvas, los subíamos a lomos de un burro que teníamos y a través de una vereda empinada, bajábamos con cuidado para no escurrirnos y no caer a un barranco bastante peligroso. Eran unos quinientos metros con mucha dificultad, pero duraban poco y al final, llegábamos a la carretera, me asomaba a la Fuente del Raso y veía su agua salir. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario