NEREA
Encerrado en mi casa
traté de analizar mi tristeza
pero los pensamientos abundantes
no me dejaban salir de la nostalgía.
Recordaba episodios grandilocuentes
como la paz del Ulster, los asesinatos
del País Vasco, los tres millones
de parados...
Volví a encontrarme bloqueado
el círculo se repetía una y otra vez
sin una alternativa esperanzadora.
Más tarde rememoré tu cuerpo
de ocho años, tus primeros meses
entre mis manos, tu cabeza rapada
de bebé y me dieron fuerzas para
seguir enfrentándome a mis fantasmas.
Para poder seguir mirando cada
mañana, tu cara blanca al
subir la persiana, entre tu
oso de peluche y tu muñeca favorita
(escrito en 1998)
PATERNIDAD
Estoy volcado en este
mundo que se mece
entre el consumo
Me irrito en este cuaderno
de soledad, pero mi
vida sigue siendo placentera.
He tomado el sol de
la tarde mientras esperaba
a mi dulce hija en
su vuelta del colegio.
Después me han
acariciado el dorso
y he recordado tiempos
pasados.
DE RODRIGUEZ
Estoy aquí anclado
en este barco
sin rumbo.
Miro por las escotillas
y diviso a lo lejos,
incertidumbres, tratos
maltratos e indefesiones.
La ternura me
viiene por el hilo
telefónico.
¡Papá¡
Hemos llegado.
Estamos bien
no me ha dolido la barriga
hace una niebla en el mar.
HIJA
En estos dias tan
solitarios.
Mientras el sol reluce
a 40º
Te recuerdo Nerea
con tus tres años
tu vestido cortito
tu sonrisa tan amplia
y dos cerezas en
tus orejas.
Soñaba contigo
visitando el mundo
enseñando tu vida
a cualquier universo
No hay comentarios:
Publicar un comentario