Para llegar al lugar de la ermita de San Isidro, hay que ir por la carretera de Priego de Córdoba y a la izquierda dirigirse a un carril que lleva a la misma ermita del santo. Allí, en el día de ayer, se congregó una gran multitud que quiso, como es costumbre, dar realce a esta fiesta que esta comprometida con el campo y con la Agricultura, ya que a San Isidro se le representa con una yunta de mulos arando y su milagro es que la yunta araba sola mientras San Isidro descansaba.
Entorno a la ermita, se montó un escenario donde se dijo la misa, a la que siguieron decenas de personas y además en algunas fases fue cantada y hubo alegría y devoción y se habló del campo, de los olivos, y la gente iba vestida con trajes típicos y algunos prepararon las carretas, llenas de flores y repartieron dulces y habas recién cogidas de la parcela.
La procesión fue acompañada por la Banda Municipal de Alcalá la Real y transcurrió por medio del campo, pasando la carretera y volvió después a la ermita.
Hubo exhibición de baile flamenco, con la Escuela de Diana Muñoz y a las 14:30 horas se invitó a los asistentes a una estupenda comida, en medio del olivar.
La fiesta fue un nuevo canto a las gentes del campo que siguen confiando en San Isidro y todos pidieron en el altar que la misma continue y que el santo Labrador siga velando por los sembrados.
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