Las figuras de aquellos antiguos profesores están presentes en la exposición de los 50 años del IES Alfonso XI. Don Juan Borrego, don Pedro Ríos, don Ramiro, doña Lourdes y doña Carmen Sánchez Cañete y la recordada Carmen Juan aparecen en muchos de los documentos expuestos en la sala del Palacio Abacial y los antiguos alumnos de este centro de Enseñanza Secundaria los evocan al recordar aquellos años de estudio cuando eran jóvenes y les esperaba un futuro prometedor.
Cincuenta años es toda una vida y en esta exposición los recuerdos se multiplican, a pesar de que no existe mucha documentación de los primeros años de este centro. De entrada, un video de la despedida del profesor Manuel Millán, muestra el cariño que toda la comunidad del instituto le profesaba, con escenas muy emotivas de compañeros y alumnos y muchos muestran sus lágrimas que no pudieron contener al despedirse de este hombre.
El IES Alfonso XI tiene una gran historia y es el centro de Enseñanza Secundaria por antonomasia de Alcalá la Real, gran parte de los estudiantes de Alcalá la Real, Castillo de Locubín y Frailes pasaron por sus aulas y recibieron una enseñanza esencial para su futuro en la vida. Este centro tuvo un precursor que fue el COPEM alcalaíno, que tuvo sus dependencias en el Palacio Abacial, allí estudiaron muchos alumnos y otros tantos profesores que luego inauguraron el IES Alfonso XI en el año 1969. Doña Carmina; doña Carmen, la de Francés; don Eduardo, el cura de Religión; Pepe, el maestro, que impartía clases de Educación Física, o don Abelardo, profesor de Dibujo y director, son caras conocidas para muchos alumnos que ahora peinan canas. Pero por el IES Alfonso XI ha pasado parte de la historia alcalaína y profesores como Francisco Martín, Alejandro Caño, Rafaela López, Fernando Fedriani, Daniel, Ana Cortecero, Ricardo San Martín, Antonio Atienza, Miguel Estepa, María del Carmen Martínez, Juan Manuel Aguilera, José Luis Ruiz, María Victoria Moya, Antonia Arco, María Dolores Muñoz, María José Sierra, Raquel Serrano, Mónica Vargas, Dulce Nombre Sánchez, María Engracia Ortega, Juan José Torres, Pedro Pablo Peraba y muchos más que impartieron una enseñanza pública y democrática y han elevado el nivel educativo de muchas personas.
La exposición es un recuerdo a la enseñanza pública, es un recuerdo a aquellos profesores que como don Juan Borrego, impartieron enseñanza con gran responsabilidad y a pesar de que algunos de sus métodos ahora no tienen cabida, lograron que muchos jóvenes de la comarca tuvieran unos estudios que le abrieron el camino para tener una vida mejor. Las Matemáticas, la Filosofía, la Literatura, la Física y la Química, la Historia, el Griego o el Latín, el idioma francés y más tarde el inglés, el Dibujo o la Educación Física fueron y son asignaturas que elevaron el nivel de conocimientos de muchas personas de la comarca de la Sierra Sur y les hicieron vivir una vida mejor.
El edificio del IES Alfonso XI alberga a más de 700 estudiantes de la comarca y forma parte de la historia de Alcalá la Real, ahora esta enseñanza está al alcance de casi todas las familias y sus hijos pueden estudiar hasta el Bachillerato, cuando se inauguró, no todos los niños podían estudiar la enseñanza secundaria y había muchas más diferencias sociales; el IES Alfonso XI ha contribuido a la democratización de la enseñanza; ahora hay nuevos alumnos como Laura, hija de Ana y Moisés que cada día se levanta para ir a sus clases correspondientes y está contenta con lo que aprende y le han dado una beca para visitar Italia y cada día viene contando las cosas que le ocurren y lo que aprende con sus profesores.
Aquellos alumnos que se subían a los autocares de Contreras en el año1969, no son los mismos que los de ahora. Ricardo Bellido se licenció en Historia del Arte y hoy es un pintor de una buena categoría; Teresa Martín fue una alumna brillante y se licenció en Lengua y después en alemán y es profesora en Córdoba. Aquellos alumnos que llegaban de Frailes o de Castillo de Locubín, hacían un gran esfuerzo para poder estudiar. Tenían un gran respeto a sus profesores y consideraban un privilegio poder formarse y conseguir el Bachillerato.
Volver a los pasillos del Alfonso XI, mirar los carteles del tablón de anuncios, sentarse en el banco y ver pasar a la gente que sale de clase desesperadamente; recordar aquellas clases en las que se oían cosas maravillosas que no estaban al alcance de cualquiera, chapurrear el idioma francés con los viajeros de aquellos autocares que hacían parada junto al Paseo de los Álamos, ver venir a don Juan Borrego por las escaleras y el corazón casi se paraba; bajar las escaleras e ir al salón de actos, un tanto desvencijado, echar una ojeada a la sala de profesores,encontrarte con Luis el Bedel que venía todos los días, andando, desde Charilla, vibrar con Custodio Pablo cuando iba a Cesta y Puntos.
El IES Alfonso XI sigue en pie, después de 50 años, después de pasar toda una vida por sus aulas, hay tanta gente que ha vivido estos años, hay tantas historias sin contar que este centro forma parte de las vidas de mucha gente, de alcalaínos y fraileros, de profesores y de alumnos, de directores y subalternos y todos juntos han escrito las páginas de estos años en grandes letras y las seguirán escribiendo.
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