Mucha de la gente que acudió el pasado martes al teatro Martínez Montañés para ver el espectáculo Opera. Requiem, dentro de los Festivales de Agosto alcalaínos, no sabía que le esperaba, pues no había muchas referencias de esta obra. No obstante, al final la ópera gustó y los aplausos se impusieron con mucho público puesto en pie que daba así su beneplácito al trabajo realizado por estos hombres y mujeres y todos juntos recibieron los honores, mientras agradecían los aplausos.
De este modo, los Festivales de Agosto entraron en materia y a las 22:00 horas del pasado 1 de agosto, comenzó el público a entrar en el teatro Martínez Montañés. El aforo de las butacas se completó y a los palcos subieron unos pocos. Desde allí, en el escenario se divisaba un desnudo camuflado con una especie de gasa blanca y las cortinas se deslizaron hacia sus lados y comenzó el espectáculo.
Una banda de rock, los coros de la Coral Alfonso XI, dos mujeres que danzaban en el escenario y el cuerpo yacente. Todo parecía un apocalipsis que presagiaba una lucha. Las manos de los músicos se peleaban con sus instrumentos, las dos bailarinas eran bipolares como el bien y el mal y una lucha se cernió entre ellas, se peleaban, se amaban, trataban de conquistarse y una de ellas se dirigió al desnudo yacente y lo fue llenando de frutas de todo tipo. Mientras devoraba una sandía y la sensualidad brotaba en el ambiente.
Esta obra que fue estrenada en enero de 2016 en la Universidad de Granada está compuesta por David Montañés y obtuvo un gran éxito en su primera salida. Ahora se ha presentado en el municipio alcalaíno y es sugerente, moderna y mantiene al público en un estado de ansiedad que no aparta los ojos del escenario. Es una obra desconcertante, con una música de rock trepidante y el público se divirtió y pasó un buen rato y al final salió entusiasmado y muchos de los presentes hablaban de la misma en los pasillos. Y al final, las caras sonrientes de los actores, músicos, componentes del coro, se dieron la mano, se felicitaban entre todos y los aplausos dieron el veredicto final.
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