Los gobiernos locales de los municipios de la comarca tratan de dar diversión a sus vecinos. En Frailes y durante este fin de semana se han desarrollado las VI Olimpiadas de Juegos Tradicionales. Un ejemplo de participación en actividades de ocio, en las que medio pueblo interviene en las mismas, mientras el otro medio las contempla, las vive y se divierte.
Los actos comenzaron con el desfile de los equipos, más de 300 personas distribuidas en 11 equipos, realizaron un gran recorrido, con una gran explosión de alegría, y un derroche de imaginación, todo para pasar dos jornadas llenas de diversión y de convivencia.
El recorrido se desarrolló desde el exterior de la Casa Consistorial hasta el recinto ferial en las Eras del Mecedero. Las calles estaban adornadas con banderas olímpicas y los equipos fueron llegando, todos uniformados, con camisetas de diversos colores y con el nombre de cada equipo a las espaldas. Subidos en automóviles de alta cilindrada, con equipos de música y neveras llenas de bebida fresca para combatir el inmenso calor que ha hecho en estos días, los más de 300 participantes, estaban radiantes, respiraban alegría, bailaban y se movían como si fuese la Olimpiada de la alegría. Así iniciaron el recorrido y la algarabía que desprendían, atrajo a cientos de fraileros y visitantes y los llevaban hasta el recinto ferial, donde iban a iniciar la competición.
La concejala de Festejos, Lucía Serrano, fue la encargada de llevar el peso de la competición y con autoridad y buenas formas, se iniciaron los juegos en el escenario del recinto ferial; por allí fueron pasando los equipos para dirimir la competición a través de los juegos; el salto de la comba fue uno de los primeros, los equipos iban aguantando, unos más que otros, mientras Lucia Serrano contaba las veces que saltaban, hasta que había algún error y entonces paraban.
Esta Olimpiada de los Juegos Tradicionales de Frailes es la expresión de la diversión y la resolución de un teorema de la diversión en los municipios, así por poco dinero, el Equipo de Gobierno de Frailes ha inventado una fórmula de ocio para muchos fraileros; sólo ha hecho falta la participación ciudadana, comprar unos cientos de camisetas e involucrar a mucha gente para esto.
En esta edición, para proclamarse campeones, los equipos tuvieron que enfrentarse a diferentes pruebas, tales como la carrera de la alpaca, en la cual se deberá de transportar una alpaca de paja de 30 kiogramos a lo largo del recinto ferial en el menor tiempo posible.
Otra prueba que puso en jaque a los equipos fue la carrera de sacos, la cual transcurrió entre la Avenida de Andalucía y la calle Santa Lucia, donde los concursantes tuvieron que realizar la carrera con las piernas metidas en sacos.
Las pruebas del pañuelo y la soga, ambas realizadas en el Pabellón Municipal, fueron un atractivo para participantes y público.
Los equipos estaban formadaos por familias como Los Pajaricos o Los Tanos, otros por una serie de amigos que se juntaron para intervenir en este torneo anual y así hasta once equipos que dirimieron en buena lid sus diferencias con juegos tradicionales y de siempre.
Las VI Olimpiadas de Juegos Tradicionales de Frailes son la expresión de la diversión de un pueblo en las que la participación vecinal es esencial para las mismas, y todos los habitantes de la villa se implican de alguna manera.
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