Cualquier día iremos a abrir el grifo del agua y no caerá una gota, pondremos la tarjeta en el cajero y no nos dará ni un euro o iremos a nuestro trabajo y las puertas estarán cerradas. Hay como un ambiente de gran inestabilidad que recorre nuestras conciencias. Ha sido por unos y por otros, desde el caso aquél del señor Vera que arrambló con parte de los fondos reservados, hasta el reciente del Sr. Camps,que dice que es inocente y que la historia lo juzgará; gran parte de la clase política ha hecho 'su trabajo'mirando por sí misma antes que por la ciudadanía. Esto quiere decir que no hay una conciencia democrática en nuestra nación y que tardará en haberla. Porque con tanto ejemplo que nos dan, no solo los políticos sino cualquier vecina que cuente su marido con una empresa y ella esté apuntada al desempleo y no le de ningún pudor el hacerlo, y lo hace como si fuese una cuestión común y sin plantearse ninguna duda.
El follón montado con la deuda soberana y con las reuniones de los politicos europeos es otro teatro que cada semana vemos en la televisión. Los politicos más importantes del mundo no saben atajar este tipo de problemas, cuando cualquier ciudadano sabe como sacar su casa adelante y vivir dignamente. Es todo un teatro con unos actores sin director, que nos llevan al caos y nadie dice nada, como si fuésemos unas ovejas que las conducen al matadero.
No puedo estar más de acuerdo. Creo que con un poco de sentido común y, llamémosle, ética la clase política -sin distinción de siglas (sálvese quien pueda)- podría llevar "la casa adelante y vivir dignamente". Sin embargo, mientras prime todo lo que prima hoy día... no será posible.
ResponderEliminarUn saludo