Hay días importantes en los que te sale aplaudir a nuestros semejantes por haber realizado una serie de actividades que van en beneficio de la colectividad. Ayer, fue uno de ellos en Alcalá la Real. Desde las 19:00 a las 21:00 horas, el Ayuntamiento y numerosos ciudadanos premiaron la labor de personas y colectivos que han realizado en los dos últimos años una labor callada en pro de sus semejantes.
Julián Relaño que regenta el Cafe Tertulia Casablanca; Patrocinio García y Francisco Sánchez; la empresa Caiba, el matrimonio formado por Teresa Domínguez y Valentín Álvarez; y la atleta Blanca Serrano, fueron galardonados con los premios Hércules a la Cultura, al Patrimonio, Economía, Solidaridad y Deportes respectivamente.
Todo el mundo y ellos mismos dijeron que son personas normales, pero no son personas extraordinarias porque no persiguen la gloria, ni la ganancia, ni los bienes ni el apego, ni el dinero, estas personas persiguen la solidaridad, el hacer las cosas bien, favorecer a los más necesitados, luchar por ser mejores y sobre todo tener la esperanza de una sociedad más digna y cada vez mejor.
Ayer, el teatro Martínez Montañés se vistió de gala y allí en su escenario comparecieron las personas y colectivos nombrados y las autoridades les entregaron el galardón del premio Hércules, que como dijo el concejal de Cultura, es un premio que acerca a los dioses con forma humana, es decir con todas las buenas características del ser humano. Y el público, allí reunido, lo supo agradecer con sus entusiasmados aplausos. Es digno de un premio de estas características, el matrimonio formado por Teresa Domínguez y Valentín Álvarez, que como el que no quiere la cosa, han realizado un acto de amor con personas desvalidas, con niños pequeños de pocos meses, los han recogido en su hogar y los tratan como si sus hijos fuesen.
Igualmente, la joven atleta Blanca Serrano es un ejemplo de deportista en toda España, ha ganado cientos de premios, ha subido montañas y bajado ríos y ha sabido superarse como una mujer de hoy, con su risa y su buen semblante va por esos mundos representando el deporte alcalaíno.
Julián Relaño ha hecho del Cafe Tertulia Casablanca un lugar de encuentro de los jóvenes, sin importarle las ganancias, solo que sea un lugar de convivencia y de mejora de la vida de los más jóvenes.
El matrimonio Patrocinio García y Francisco Sánchez, con su esfuerzo ha reforzado el patrimonio alcalaíno, al rehabilitar una casa de la calle Real de principios del siglo XX, convirtiéndola en un palacete que es digno de visitar y de admirar.
Y finalmente, la empresa Caiba, afincada en la aldea de Santa Ana ha dado ejemplo de como gestinar la actividad económica, con esfuerzo, tesón, innovación y con trato digno a sus trabajadores, invirtiendo en un futuro sostenible, por el bien de sus clientes y de las personas que ella creen, apostando en estos tiempos de gran crisis.
Lo de "sin importarle las ganancias" es algo relativo. La gente en Alcalá debería ser más correspondida con las personas que ofrecen todo en cuanto está a sus disposición por el beneficio de los demás y participar más, no solo de boquilla, en el tan aclamado ambiente cultural. A todos se nos llena la boca de decir: "el Casablanca esto..., el Casablanca lo otro..., hay que ver que bueno que esté el Casablanca..., y tal y cual"- pero luego, a la hora de la verdad nos movemos por quien nos pele de manera más fácil la piruleta, quién nos haga pensar lo menos posible, nos pongo el alcohol más barato y de fácil acceso.
ResponderEliminarA ver cuando los alcalainos comenzamos, ya de una vez, a ser más coherentes con lo que decimos y con lo que pensamos.