Ayer, por la mañana, había un aire de
fiesta en Alcalá la Real, se esperaba el programa El número Uno de
Antena 3, en el que era finalista la alcalaína Roko. Desde hacía varios
días se había anunciado que se iba a instalar una pantalla gigante en el
Paseo de los Álamos para ver dicho programa.
El escenario estaba preparado, los
asientos dispuestos y durante toda la tarde se trabajaba en este espacio
para que todo estuviera dispuesto a partir de las 21:30 horas. Pero no
solo eran alcalaínos sino también gentes llegados de otros pueblos de
alrededor.
Un grupo de alcalaínos había ideado todo
este montaje, se lo han trabajado durante estos últimos días y el
Ayuntamiento se hizo eco de ello; las redes sociales hicieron el resto,
pues los mensajes se sucedían al segundo para que el encuentro en el
Paseo de los Álamos fuese una fiesta y a las 22:30 horas este parque
estaba lleno de alcalaínos y de gentes enamoradas de la música y del
encanto de Roko.
La propia alcaldesa, la socialista Elena
Víboras y varios concejales estaban presentes, también los padres de
esta artista que con camiseta con la figura de Roko daban fe de lo
emocionados que estaban. Los espectadores estaban esperando y las manos y
todo su cuerpo vibraban con cada salida de la alcalaína Roko en la gran
pantalla instalada, con sus dos caras vistas a un lado y a otro.
En estos últimos meses, Roko se ha
convertido en una comunión con miles de alcalaínos que han estado ahí
apoyándola y todos han disfrutado con su voz, con su encanto, con su
forma de ser, ha sido una unión de esta mujer, de esta alcalaína que ha
llevado el nombre de la ciudad a altas cotas de popularidad, con una
gran fuerza, con una gran superación, con unas grandes ganas de
trabajar. Ha sido algo grande que se ha ido formando a lo largo y ancho
de estos últimos meses, con una alcalaína que ha tenido una gracia
especial y que ha ido ganando poco a poco y con fuerza el corazón de los
alcalaínos, como una fuerza generadora de energía. Roko ha sido y es
como el espíritu alcalaíno en estos últimos meses, ha amalgamado a la
esencia de muchas personas y con esta comunión se ha formado un espíritu
de comunión.
El programa El número Uno seguía
adelante, la parte central del Parque de los Álamos era un hervidero, de
gente unida por la voz y la energía de Roko, cada salida de ella en
pantalla era un grito unánime de alegría; pequeños y grandes gritaban su
nombre y seguía adelante en el programa y se metía en los cuatro
finalistas y después sólo quedaron tres. A la una y diez minutos de la
madrugada del día 22 de junio, fue eliminado el artista Garson de este
programa y quedaban dos, un hombre, Jadel y una mujer, y ella era Roko,
la alcalaína Roko y las líneas de teléfono seguían abiertas y también
había un premio de 100.000 euros para el ganador.
El número Uno es un concurso y poco a
poco el jurado y los que votan han ido eliminando a muchos artistas,
semana tras semana y ahora, en el último instante solo quedaron dos:
Jadel y una mujer alcalaína, Roko. Y, en esto que tuvo una nueva
actuación y le echó toda su energía y todo el mundo la aplaudía y
faltaban unos diez minutos para que se dijera la última palabra y llegó y
a la una y treinta y cinco de la mañana se cerraron las líneas
telefónicas y a la una y cuarenta minutos el público habia decidido y un
puñado de corazones vibraba pero no fue Roko sino que ganó Jadel, pero
fue igual, Roko gana y Alcalá vibra
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