INDEPENDIENTES

Por mucho que seáis independientes, pertenecéis a este mundo. Por mucho que os separéis, estaréis cercanos. Por mucho que os marchéis, seguiremos visitando las Ramblas, la Boqueria y la Seu de Urgell. No sois diferentes, ni únicos, sois como cualquiera de nosotros.

Estuve varias veces en Cataluña y me entendí con muchos de vosotros. Y a Zoe y Aina les gusta venir a Andalucía y tomar churros en el parque de Alcalá la Real. El mundo es uno, y hay ricos y pobres y los ricos tienen más cosas que los pobres, pero la alegría, el respeto, la educación, y otras muchas cosas no son patrimonio de nadie.

Somos muy iguales, cuando nos hacen daño, nos quejamos, cuando nos tratan bien, sonreímos. Por mucho que nos dejéis no os servirá de nada, porque Puigdemont habla como uno de nosotros; el joven Gabriel Rufián parece un andaluz del sur y en las Ramblas hay decenas de nacionalidades que se pasean al sol. Por muchas leyes de desconexión que aprobéis en el Parlament, nunca podréis desligaros de nosotros, porque el pan con tumaca, es como nuestro pan con tomate.

Por mucho que queráis huid de nosotros, sabed que nos parecemos mucho, y el sol, cada día, sale para todos. El sol nos calienta a todos. He visto la luna en Barcelona y es la misma que la de Frailes.

He estado en Puigcerda, en Segur de Calafell, en Bellver de Cerdanya, en Martinet, en Tarragona o en Barcelona y he visto gente que trabaja, que va a la escuela, que hace deporte, que se interesa por el mundo y por ellos mismos. Igual que aquí, en Alcalá la Real, en Frailes o en la Ribera Baja.