A las 20.35 horas de ayer, Rafael García Medina, pregonero de la Virgen de las Mercedes del año 2011, se encontraba en los pasillos del teatro Martínez Montañés, preparando el pregón y se le notaba un poco nervioso. Iban llegando personas para escucharlo y amigos que lo saludaban.
En su pregón hubo una primera parte que busca la relación histórica de Alcalá la Real con la Virgen de las Mercedes por aquello de que ella lleva más de 400 años ejerciendo de patrona del municipio. En la segunda parte hizo un recorrido por la procesión por las diversas calles, pero no recitándole piropos sino viendo a la Virgen como una patrona «cercana» que se fija en el enfermo que está en el balcón esperando que pase, en la persona que se está muriendo y es asomada por sus familiares para que pida a la Virgen de las Mercedes.
Para Rafael García Medina, ayer fue un gran día, «sin duda alguna es un evento muy importante, a pesar de que llevo cinco pregones, pero el pregón de la Virgen de las Mercedes son palabras mayores, es un honor para cualquier alcalaíno. Además, es una tarea muy difícil porque después de 39 años qué puedes decir que no hayan dicho ya».
También añadió que le había puesto mucho corazón y muchas horas. «Me he tirado ocho meses desesperado, me despertaba a las tres de la mañana, las cuatro o las cinco, con la cosa de que me tenía que ir a las seis a trabajar a la Mota y seguía escribiendo».
En el pregón manifestó que ser pregonero era el título más honroso para cualquier alcalaíno. «Aquí me tienes Señora, yo soy aquel niño de la calle el Pintor, que aprendió a rezar ante aquel viejo lienzo de Melgar en la reja de la familia Rosales, allí en la travesía, aquél que se escapaba para verte, y como veía a mis mayores, intentaba con mis manos infantiles escapar por el jaspe rojo de la pila del agua bendita a la que nunca llegaban mis dedos por más que me empinaba», dijo el pregonero.
Rafael García Medina muestra una Virgen de las Mercedes muy cercana, imbricada en las vidas de los alcalaínos, desde los labradores y los cortijeros, y también en la vida de los alcalaínos famosos como Martínez Montañés, o Pablo de Romas, el Arcipreste de Hita o el primer virrey de México.
No hay comentarios:
Publicar un comentario